Más de ocho mil vecinos y vecinas pudieron, luego de veinticinco años, recorrer el salón principal, primer piso, primer subsuelo, y la emblemática cúpula.
La inscripción para ser protagonista de la reapertura del “Faro Gastronómico” instalado frente al Congreso Nacional, se agotó en apenas treinta minutos…
Entre los entusiastas visitantes, también estuvieron presentes numerosos ex trabajadores y trabajadoras “del Molino”, quienes no pudieron ocultar la emoción, por partida doble: ¡la reapertura de la Confitería y el reencuentro con colegas y amigos!
Por ejemplo, Fernando Miño, de 81 años, trabajo desde 1962 hasta 1997-cuando cerró-, recordaba aquella experiencia de vida, de la siguiente manera: “Hice de todo, primero fui lavacopas, después mostrador…De allí pasé al servicio de lunch, hice de mozo, fui encargado de los depósitos…Carlos Menem venía a comprar brioche, scones, y pan de leche para tomar mate, cuando todavía no era presidente, luego no vino más…”
Por su parte, Elena Crea, 90 años, se desempeñó en “Del Molino” entre 1964 y 1969, quien visiblemente feliz y conmovida, manifestó: “Trabajar acá era hermoso, muy lindo…Era vendedora, tenía que saber el nombre de todos los bombones, las masas secas, lo que más salía era el Panettone, era muy rico y cuando no había tanta tarea iba adentro para hacer los envoltorios de los caramelos…En esa época el dueño era el Señor Armentano, luego llegaría el hermano…Pagaban bien y venían muchos famosos”…
¡La próxima visita se llevará a cabo el 21 de Julio próximo! ¿Quienes quieran sumarse? Van a poder inscribirse a partir del 18/7 a las 12, en la Web oficial: www.delmolino.gob.ar
Con respecto a la marcha de la restauración de la Confitería del Molino, una de las arquitectas que participa del proyecto, Nazarena Aparicio, expresó: “Terminamos la planta baja y el primer piso, lo más importante es que se terminaron las obras de infraestructura…Ahora estamos finalizando la instalación eléctrica troncal, y prontos a iniciar la instalación troncal sanitaria: agua y cloacas…Y en la Confitería, sólo quedan detalles de las vitrinas, como la ornamentación de bronce y los espejos biselados, que estarán listos en seis meses aproximadamente”.
Para conocer un poco más a este símbolo de nuestra identidad
La Confitería del Molino, fue inaugurada en 1917 por Constatino Rossi y Cayetano Brenna, dos reposteros italianos, y fue declarada Monumento Histórico ochenta años después… Luego de algunas idas y vueltas, comenzaron las obras para la puesta en valor, las que ya llevan cuatro años, a partir del emprendimiento conjunto entre la Ciudad, el Congreso y el Gobierno nacional.
La construcción del edificio, cinco mil metros cuadrados y uno de los más elevados de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, fue realizada con material importado de Italia, y la dirección del proyecto, estuvo a cargo del arquitecto Francesco Gianotti, quien también diseñó la Galería Güemes, en la calle Florida.