Una de las más importantes y significativas leyendas del rock nacional, celebra 71 años, muchos de ellos a pura música-de la mejor-, junto a su arte personalísimo y contundente que continua vigente para miles de fans que no dejan de acompañarlo cada vez que decide subirse a un escenario.
Este reconocido guitarrista, compositor y cantante formó junto a Carlos “Indio” Solari, y la “Negra Poli”, su esposa y manager, una de las mejores bandas del rock argento: “Patricio Rey y Los Redonditos de Ricota”.
Para aquellos que disfrutamos de su talento, Skay es uno de los pocos músicos locales e internacionales, cuyos riffs de introducción de cada canción son coreados en su totalidad por el público.
Con todo respeto, Beilinson constituyó “el cincuenta por ciento” de “Los Redondos”…Parte activa del Grupo, hasta aquel día, menos pensado…el de la despedida…
Poco tiempo después, Eduardo Federico Beilinson continuó con su carrera “como solista en banda”.
Cabe recordar que su primer disco luego de la experiencia con “Los Redondos”, fue “A través del Mar de los Sargazos”, editado en 2002, contó con el acompañamiento de Daniel Colombres en batería, Claudio Cuartero en bajo y la producción a cargo de “Poli”.
Su carrera siguió proyectándose, más grabaciones y se multiplicaron los recitales. En 2007, el grupo fue llamado como Skay y los Seguidores de la Diosa de Kali…En 2010, la banda pasa a llamarse “Skay y Los Fakires”, con la participación de Oscar Reyna en guitarra, Claudio Cuartero en bajo, Javier Lecumberry en teclados y “Topo” Espíndola en batería.
De su atractiva discografía, se destacan entre otros trabajos: “Talismán”, 2004, “La marca de Caín”, 2007, “¿Dónde vas?”, 2010, “La luna hueca”, 2013, “El engranaje de cristal”, 2016, “En el corazón del laberinto”, 2019.
Algo de su Hoja de Vida
Skay nació el 15 de enero de 1952 en la Ciudad de La Plata… El apodo surgió de su amiga, la artista plástica Marta Minujín…
Estudio guitarra desde pequeño y hacia fines de los años sesenta comenzó un viaje por Francia y el Reino Unido, allí pudo tomar contacto de primera mano con las novedades del mundo del rock and roll, y al mismo tiempo, siguió muy de cerca las revueltas estudiantiles parisinas de Mayo del 68…
De vuelta en su tierra, integró la agrupación platense “Diplodocum Red&Brown”, luego estuvo vinculado con “La Cofradía de la Flor Solar”. En ambos casos, experiencias relacionadas con la psicodelia y la “contracultura”.
En los años 70 decidió vivir en comunidad en Pigüé, una localidad de la Provincia de Buenos Aires. Cabe mencionar que padeció el secuestro de su padre.
Posteriormente llegaría la alianza con Carlos “Indio” Solari, y ¡¡el pogo más grande del mundo se hizo realidad en la República Argentina!!
¡Felicidades!
